Santa Rosa de Lima ilustración digital

Nacida en el siglo XVI como Isabel Flores de Oliva, fue hija de Gaspar Floresarcabucero natural de Baños de Montemayor, municipio de la provincia de Cáceres (España) y de María de Oliva y Herrera. Así lo asegura la placa en la casa de los Flores, la cual aún se conserva en dicho pueblo cacereño. En 1545, Gaspar salió de España, después de pasar por Puerto Rico y Panamá, que formaban parte del virreinato de Nueva España. Llegó al Perú en 1547 como soldado del pacificador Pedro de la Gasca quien restableció la Real Audiencia en 1549, recuperando el dominio de la Corona tras la usurpación del poder por Gonzalo Pizarro, gobernante del Perú entre 1544-1548. Gaspar Flores fue nombrado arcabucero el 9 de marzo de 1557, por don Andrés Hurtado de Mendoza, tercer virrey del Perú entre 1556-1561. El 1 de mayo de 1577, se casó, en Lima, con la criolla limeña María de Oliva y Herrera, apellidos procedentes de Aragón. Ese mismo año servía de arcabucero en la guarda del 5º Virrey Francisco de Toledo (1569-1581).
Nació el 20 de abril de 1586 en la ciudad de Lima, en aquel entonces parte del Virrenato del Perú.1​ José Manuel Bermúdez, uno de sus biógrafos, contribuyó a extender la opinión de que el nacimiento de Rosa ocurrió el día 30 de abril, pero en los registros del proceso ordinario se encuentra que la madre de Rosa y otras personas —entre ellas fray Pedro de Loaiza, confesor de Rosa y su primer biógrafo— declararon como fecha de su nacimiento el día 20 de abril.4​ Algunos cronistas señalan que Isabel Flores de Oliva nació en una aldea llamada La Puntillá, en la isla de Taboga (en Panamá)[cita requerida]. Esta información fue refutada en el "proceso de canonización", publicado en los archivos del Vaticano.
Isabel o Rosa fue la cuarta hija de los trece hijos nacidos del matrimonio Flores de Oliva, fue bautizada, según partida, el 25 de mayo de 1586, en la Parroquia de San Sebastián, en Lima por el sacerdote Antonio Polanco, siendo sus padrinos Hernando de Baldés y María Osorio. De sus doce hermanos, solamente se conocen a nueve:5
  • Gaspar Flores de Oliva, el primogénito, bautizado en la parroquia de San Sebastián el 1 de junio de 1579. Fue soldado, sirviendo en las guerras de Chile, donde alcanzó el grado de capitán.6
  • Bernardina Flores de Oliva, bautizada el 13 de junio de 1581. Murió en Quives a los 14 ó 15 años.
  • Hernando Flores de Oliva, bautizado el 24 de mayo de 1584. Se dedicó a la agricultura y murió en 1627.
  • Francisco Flores de Oliva, bautizado el 6 de junio de 1590. Murió joven.
  • Juana Flores de Oliva, bautizada el 11 de septiembre de 1592. Salió en la procesión en honor de Santa Rosa en agosto de 1669.
  • Antonio Flores de Oliva, bautizado el 8 de julio de 1594. En 1688 vivía en Condoroma, en la sierra sur del Cuzco. El virrey Conde de Lemos, en carta de ese año, lo recomendó a la Reina Gobernadora de España.7
  • Andrés Flores de Oliva, bautizado el 21 de septiembre de 1596. Vivía en 1620.
  • Francisco Matías Flores de Oliva, vivía en 1620.
  • Jacinta Flores de Oliva, bautizada el 25 de abril de 1603 de emergencia, a los dos meses de edad.
A ellos hay que añadir tres niños o niñas, que debieron morir inmediatamente después de nacer, pues parece que ninguno de ellos llegó a bautizarse.5
A temprana edad - emulando a la terciaria dominica santa Catalina de Siena, ella empezó a ayunar tres veces por semana y a realizar severas penitencias en secreto. Su compañero de juegos fue su hermano Hernando, el cual siempre la apoyó y ayudó. A los doce años se mudó con su familia hacia Quives, un pueblo a 60 kilómetros de Lima ubicado en el valle Chillón. Es aquí donde ella recibirá la confirmación de manos del futuro santo católico Toribio de Mogrovejo, su padrino fue el sacerdote del pueblo Francisco González. Es en Quives donde, al parecer, empezó con sus mortificaciones contrayendo un reuma muy fuerte, con consecuencias dolorosas para su recuperación, que ella ocultaba a su madre.
El día de su confirmación en el pueblo de Quives, el arzobispo Toribio de Mogrovejo, la llamó Rosa sin que alguien pudiese darle noticia al arzobispo de este nombre tan particular e íntimo. Aunque le mortificaba que la llamasen así, a los 25 años aceptó y quiso que la llamaran «Rosa de Santa María» porque, según relató su madre, fue a conversar con un sacerdote a la iglesia de Santo Domingo manifestándose la molestia que le causaba que la llamen "Rosa", pero el sacerdote la tranquilizó diciéndole: "Pues, hija, ¿no es vuestra alma como una rosa en que se recrea Jesucristo?". Con esto quedó tranquila y segura del nombre que le habían dado. Más adelante, según sus biógrafos, ella afirmó que en episodios de tipo místico, la Virgen de la Merced y el Niño Jesús (cuando se casó con él en desposorio místico) le confirmaron el nombre.
Regresó a Lima con su familia ya siendo una joven. Debido a problemas económicos de la familia, trabajaba el día entero en el huerto y bordaba para diferentes familias de la ciudad y así ayudar al sostenimiento de su hogar.
Cuando fue admirada por su belleza, Rosa cortó su cabello y se echó pimienta a la cara, molesta por haber atraído pretendientes.8​ Ella rechazó a todos sus aquellos que la pidieron en matrimonio, a pesar de la oposición de amigos y familiares. Rosa pasaba varias horas al día observando el Sagrado Sacramento, el cual recibía a diario - una práctica extremadamente rara en aquella época. Finalmente, después de 10 años, hizo voto de virginidad. Rosa atrajo la atención de los frailes de la Orden Dominica. Ella deseaba convertirse en monja, pero su padre lo prohibió, por lo que al cabo de unos años ingresó en la Tercera orden de Santo Domingo a imitación de santa Catalina de Siena.
A partir de entonces se recluyó, prácticamente, en la ermita que ella misma construyó, con ayuda de su hermano Hernando, en un extremo del huerto de su casa. Sólo salía para visitar el templo de Nuestra Señora del Rosario y atender las necesidades espirituales de los indígenas y los negros de la ciudad. También atendía a muchos enfermos que se acercaban a su casa buscando ayuda y atención, creando una especie de enfermería en su casa. Muchos biógrafos escriben que ayudaba a fray Martín de Porres, lo cual no está probado en el texto del "Proceso de Martín de Porres" (Lima 1579-1639), el cual es santo desde 1962. Rosa se permitía dormir sólo dos horas al día, de tal forma que pudiera dedicar más tiempo a la oración.9​ Usaba una pesada corona de plata, con pequeñas espinas en su interior, emulando la Corona de Espinas de Jesucristo.

Comentarios

Mas publicaciones para ver

Design and illustration of Christmas cards Merry Christmas Peru / Diseño e ilustracion de tarjetas de navidad Feliz Navidad Perú

Mapa mundi - hecho en illustrator - Banderas de todo el mundo world - map - made in illustrator - flags from around the world